miércoles, 26 de diciembre de 2012

MIRTA SOLER



PINTURA BLANCA 

La pintare toda, exclamo Juan.
Si, si  y debería acomodarla un poco, parece que se quiere desintegrar.
Lucy que  contemplaba la acción, no quería opinar, pero pensaba en silencio, ¡otra porquería en casa!. Cerró la puerta de un fuerte golpe. Y tembló el techo.

¡¡No puede ser!!… ¡Siempre lo mismo!............

Juan, miro hacia arriba, pensó que se caía un pedazo y lo aplastaba, pero no… no paso nada, solo un temblor.

Siguió  con su tarea, tratando de darle forma. Es decir  sostenerla,  porque le costaba mucho  mantenerse en pie. Si , la vieja silla , la que pretendía pintar.

La silla...   si... ahí en un rinconcito, se sostenía por la pared, y Juan, buscaba y buscaba... Que buscaba, pintura, porque pensó, con esto la arreglo y quedara hermosa...

¡Aquí creo que hay algo!... Si,  un tarro oxidado, pintura verde parece, ¡lindo color!, un, dos y salta la tapa...
Que mala suerte, mal cerrado, pintura seca .
Descartado el color y el tarro
Otro por tarro, veremos.
¡Veremos!. Exclamo Juan, un tarro  de pintura amarilla, por que se veían unas franjas en el exterior. Seca... pero adentro...
¡Saquemos la tapa!… Que mala suerte, no tenia nada, también descartado el color y el tarro.

¡Veremos! , ¡Veremos...!
Un tarro…¡este si que tiene!…un tarro de pintura blanca!
Sacare la tapa, a primera vista una película gruesa, con la  espátula y ya está… y ahí si… Manos a la  obra...  
Toma entre sus manos el valioso hallazgo: El tarro, con tan mala suerte que se resbala... rodando y rodando deja esta vez una película de pintura blanca de máxima pureza, pero en el piso, que empezó a deslizarse como una ola que avanza sobre la costa acariciando la arena.

Al escuchar el ruido, Lucy... Abrió  la puerta... se quedo como suspendida en el aire… La escena: Juan arriba de la silla que se tambaleaba, la pintura blanca que  parecía que lo seguía...

¡Noooooooooooo! exclamo Lucy

¡Siiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiii! Grito Juan

La silla no pudo resistir el peso , sus patas apolilladas... se desplomaron, y Juan también…… ya era un montón de algo que no servia , se levanto como pudo y trato de escapar por la ventana, la pintura blanca lo seguía,  parecía que subía la pared, miraba la terrible película blanca, como  avanzaba, sentía, persecución, miedo… un tormentoso momentos, turbulencia… frió... Fin...

Juan, agitado, lleno de sudor,  cae al exterior de la habitación,  no quería abrir los ojos, el dolor del golpe quizás, sentía a su vez en la piel algo frió, pensó es ella, la pintura, estoy cubierto se veía blanco, se veía atrapado… por un instante pensó en la pobre silla lo que hubiese sentido, la misma sensación...  
El sentimiento de esa silla… era el que Juan estaba percibiendo.

El cuadro, quedo plasmado, la silla rota  que evito ser pintada de color blanco, la cara de asombro  de Lucy y la huida despavorida  de Juan….

No hay comentarios: