Poemas sin importancia
Carlos Margiotta
LA CITA
Te
esperaré
en
tu lugar desierto,
donde
no hay palabras
sólo
ausencias.
Te
esperaré
en
la orilla de tu herida
allí
donde me dijiste
ven
acaríciame.
Te
esperaré
otra
vez donde gimes
en
el lugar de tu dolor
donde
me distes la cita.
SÁBADO
No
hay palabras en tu boca
amanecida
de ausencias,
ni
lágrimas rodando
por
el lunar de tu mejilla.
El
universo ha desaparecido
detrás
de tu mirada mojada.
Los
humanos huyeron del lugar
junto
a los ángeles y los pájaros.
Sólo
estamos tu y yo
como
dos desconocidos
tan
distantes y tan cerca
en
la mañana del sábado.
MI MADRE
Grabada
sobre
la
piel de la historia
Día
tras día
Año
tras año
Siglo
tras siglo
Mi
madre me sigue enseñando
El
significado
De
la palabra amor.
ME ENCONTRARÁS
Me
encontrarás
En
ese lugar impreciso
Entre
la luz y la oscuridad
Entre
la llegada y la partida
Entre
al amor y el desamor
Entre
el nunca y el siempre
Entre
el pasado y el presente
Y
cruzaré el puente
Que
nos separa
Entre
tu mirada y la mía.
LOS AMANTES
Los
amantes se muerden,
se
chupan, se mojan,
se
aprietan, se retuercen,
se
gimen, se lamen,
se
refriegan, se agotan,
hasta
el final... y más tarde
se
vuelven a morder, a chupar,
para
agotarse en amor...
TUS BESOS
Besos
tibios, besos acurrucados, besos serenos, besos sucios, besos consuelo, besos
araña, besos distraídos, besos ausentes, besos malcriados, besos tristes, besos
consumo, besos misericordiosos, besos fugitivos, besos mojados, besos
atormentados, besos casuales, besos adiós, besos invasores, besos
emprendedores, besos trémulos, besos aburridos, besos asquerosos, besos
mentirosos, besos maricones, besos iluminados, besos rigurosos, besos heridos,
besos ansiosos, besos chicles, besos perdón, besos urgentes, besos oscuros,
besos tumultuosos, besos simulados, besos amparo, besos parciales, besos
trompita, besos amargos, besos tormentosos, besos idiotas, besos arrepentidos,
besos olvidados, besos flor…
Tus
besos, siempre tus besos
MUJER DE PIEDRA
En
el principio era el caos.
Después,
una mujer
encerrada
en la piedra
Entonces
apareciste tú,
pájaro
de arena y viento,
barajando
un destino prohibido.
En
tu vuelo fuiste niebla,
grises
sobre la piel mineral,
pechos,
madre.
Y
te posaste desnuda
sobre
el agua del adiós,
como
una ausencia.
Tu
seno se abrió
con
misteriosos bandoneones
de
mármol y cielo.
Nervaduras
fértiles de fuego
encendieron
la noche,
y
tu parto fueron estrellas.
Las
espigas buscando el sol
cantaron
una plegaria
de
adoquín y esperanza.
Signos,
huellas de dos caras
grabadas
en la tierra curva
de
rectas y olvido.
En
el final fue la piedra.
Después,
palabras.
Y
todo se volvió eterno
NOCHE
Cuando
se vaya la noche
y
deje tu piel mojada de luna
caminaré
detrás de tu mirada
sobre
las palabras del adiós
esas
que nombras en silencio
en
cada beso, en cada temblor.
La sombra
desparramó su figura
sobre las
baldosas de oro
escritas
de ilusiones tempranas
y
berretines verdes.
Derramó
el oscuro
como una
gola acostada
en las
miradas rojas de la tarde,
ynse
quedó abrazada a los pies para desaparecer
dentro de las piernas
de su dueño.
dos cuerpos
dos palabras
dos miradas
dos alientos
dos distancias
dos silencios
dos perfumes
dos orillas.
Como puentes flotantes,
bajo el torrente,
el tuyo,
el mío.
en que tu palabra escrita
se encuentre con la mía
en un estrecho
renglón de papel,
entonces no harán
otra cosa que besarse.
recogió los peces.
El de cabeza de piedra
preparó el fuego
y el hombre alado
tejió el nido,
para que los guerreros
descansaran sus escudos
e imaginaran a una mujer
florecida en venas.
y dejar que la mariposa me lleve
atado a sus nervaduras
hasta posarme en cualquier cielo.
Desprenderme como una hoja
y caer por el tobogán lustroso
con hijos abrigados
de arena y otoño.
Podría renacer en la plegaria
de un árbol arrepentido,
ser azul, rojo, amarillo
morir olvidado en el pincel
si La Maga lo quisiera.