jueves, 15 de octubre de 2009

RICARDO ALLIEVI


CUESTIÓN CELULAR

De verdad, no sabe cómo pasó. Quizás fue una cuestión de suerte, a la que estaba acostumbrado o un poco de azar.
Se encontraba profundamente dormido después del baile en el partido con el equipo contrario, el triunfo, el boliche y el festejo con los amigos del equipo y las chicas que los acompañaron para seguir bailando. Maldijo cuando sonó su celular tan temprano. Con los ojos cerrados, tanteó sobre la mesa de luz y a oscuras, lo encontró, se lo llevó al oído y dijo secamente un hola profundo.
No era para él. Ella estaba buscando a otro. No sabe si era Víctor, Victorio, Victorino o Victorioso; pero tampoco el apellido. Era una voz femenina, joven, melosa y acariciante en el oído. No era él. Ella cortó y él siguió durmiendo.
En su celular quedó el número del que lo había llamado. Lo vio a la mañana siguiente, casi al mediodía, cuando pudo despertarse. No era ningún conocido.
Esa noche apretó los botones del número y lo atendió ella con su hola tan dulzón. Tenía cancha para que no cortara, parecían incentivarse mutuamente en la charla y se averiguaron algunas cosas.
El vivía otra conquista y le pidió encontrarse para conocerse y charlar personalmente.
Ella aceptó; pero faltó a la primera, no fue a la segunda y le avisó en la tercera que le era imposible, cuando él le reclamó sus incumplimientos.
Volvió a llamarlo otra noche y él escuchó evasivas sin fundamento.
Cambió el número del celular, no se lo dijo ni la llamó más. No estaba acostumbrado a los fracasos o derrotas. Fue siempre un vencedor glorioso. En la cancha con el básquet y con las minas que lo iban a ver hacer dobles. En este caso no llegó siquiera a un simple para que lo conociera y aplaudiera.
No dejaba el básquet. Allí también se lucía porque, como decía su padre, en la cancha se ven los pingos que se juegan para conseguir los laureles de la victoria. No sabe si ella se llamaba Victoria porque no fue suya ni de ninguno de sus compañeros del equipo en charlas de vestuario o brindis de triunfos.

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